La ciudad de Madrid tiene una historia milenaria. Desde sus orígenes árabes, pasando por la época medieval llegará a ser la capital de España en 1561, bajo el reinado de Felipe II. Vivirá el poder y el esplendor de la familia de Habsburgo y la de Borbón, protagonistas de siglos de riqueza y de decadencia, de guerras y revoluciones que dejarán su recuerdo eterno en la ciudad.
Madrid fue fundada por el emir Mohammad I bajo el reino de Al-Ándalus.
Se transformará en una ciudad fortalecida, con su Alcázar, levantada en el río Manzanares. Recibe por eso el nombre de Mayrit (después Magerit, en castellano), que significa “arroyo”, algo seguramente vinculado con las aguas. Sin entrar en detalles demasiado lingüísticos la palabra podrías tener además un origen romance que significa “matriz”, de agua, entendiendo la abundancia de agua como elemento predominante en su fundación. De allí el lema “Fui sobre agua edificada”… que caracteriza la historia de Madrid.
Será conquistada en el año 1085 por el rey Alfonso VI, que ampliará el perímetro y transformará el estilo. Poco a poco, a lo largo de los siglos, la ciudad tomará el aspecto que hoy reconocemos en la Plaza de la Villa, en la Plaza Mayor (siglo XVII) hasta llegar a la centralísima Plaza de la Puerta del Sol, reconstruida en el siglo XIX.
A lo largo de más de mil años la ciudad ha cambiado para dejar espacio a la elegancia actual y al mantenimiento del casco histórico, como vestigio de la antigüedad, en perfecta armonía con la modernidad. Lo que casi seguramente hace tan especial la ciudad de Madrid: esa mezcla arquitectónica tan distinta y tan única. En Madrid cabe todo, histórica y culturalmente.
¿Sabíais que la ciudad tiene un escudo real con un oso y un madroño? Si no lo creeis, será fácil contagiaros con la euforia de hacer una foto con la estatua de bronce que preside la plaza más rebuscada de Madrid. Desde 1967, el Oso y el madroño presencian la Plaza de la Puerta del Sol y reciben visitantes de cualquier rincón del mundo.
El escudo realmente representa a una osa.
¿Sabéis por qué? Si queréis descubrirlo os espero en la visita guiada así os lo contaré.